Ruta "Entre el Jura de Suabia , el lago de Constanza y los Alpes"

Puedes conducir coches. O soñar con coches. Stuttgart es una de las mejores direcciones imaginables para ambas cosas: Aquí no sólo se fabrican coches de renombre mundial, sino que la historia del automóvil está más viva que en ningún otro lugar. Deseos sobre cuatro ruedas: En Stuttgart, se convierten en una maravillosa realidad en cada visita.

Tres iglesias románicas de los siglos IX a XI dan testimonio de la importancia de la antigua abadía benedictina de la isla monasterio de Reichenau, en Baden-Württemberg. Fundado en el año 724, se convirtió rápidamente en uno de los monasterios más importantes del sur de Alemania. La tradición monástica sigue viva hoy en día en las fiestas y procesiones religiosas de la isla, únicas en el mundo.

Nueve yacimientos de pilotes se encuentran en las orillas del lago de Constanza, en Baden-Württemberg, y otros nueve en la Alta Suabia, al sur de Augsburgo y en el lago de Starnberg. Junto con otros 93 yacimientos de Francia, Italia, Austria, Suiza y Eslovenia, representan un patrimonio arqueológico cuyos inicios se remontan a casi 7.000 años.

La "Iglesia de peregrinación del Salvador Flagelado en el Wies", al pie de los Alpes, está considerada una obra consumada del arte rococó bávaro. Alrededor de un millón de visitantes de todo el mundo vienen aquí cada año: para mirar, maravillarse, rezar, asistir a los servicios de la iglesia, escuchar uno de los conciertos en verano y, por último, pero no menos importante, para la contemplación tranquila.

El poder simbólico de Neuschwanstein fascina al mundo entero por el entrelazamiento de la arquitectura romántica idealizada con la trágica historia de su propietario: con la pérdida de su soberanía en su propio reino, Luis II creó su propio mundo de leyendas y cuentos de hadas.

Se le puede llamar estilo de vida o forma de vida: ambos son muy importantes en Múnich. No importa si esto se debe al famoso cielo blanco-azulado o a la belleza de la ciudad. En cualquier caso, a los muniqueses siempre les gusta mostrar su mejor cara, ya sea en una cervecería, en uno de los magníficos bulevares o en el estadio del FC Bayern.